El solo hecho de pensar e imaginarse a la figura de un jugador como Damian Lillard cambiar de equipo y vestir el uniforme de Los Ángeles Lakers, jugando al lado de LeBron James y todas las figuras de este equipo, no cabe dudas que el impacto en la liga no sería nada normal.

Esto considerando que los Lakers vienen de jugar una temporada nefasta en lo deportivo al no acceder a la postemporada, con la inestabilidad en la que se sumergió otra de sus figuras como Anthony Davis, pues quizá el haber tenido al actual base los Trail Blazers les haya cambiado el destino final.

Todo esto lo traemos a colación, dado que el propio Lillard ha confesado en una intervención que tuviese en una entrevista al portal ‘The Ringer‘, que llegó a sostener una reunión con James y Davis previo a la campaña 2021-2022, en donde indica que este par le estuvo haciendo muchas preguntas, y que hasta llegó a sentir que lo intentarían convencer de unirse a los Lakers.

Con todo y esto, Lillard siempre pensaba internamente que su prioridad era seguir siendo jugador de Portland, aunque llegó a considerar darse una oportunidad. “¿Qué pasa contigo? ¡Acércate a la casa!, me llegó a decir LeBron, y yo estaba como que no sabía lo que estábamos haciendo en ese momento“.

Lillard recalca que en todo momento siempre trató de ser honesto con ellos y con él mismo, y que solo se dedicó a responder lo que le preguntaban. “En ningún momento estaba enviando amenazas ni disparos, solo soy honesto“.

El base de 32 años le ha dedicado sus 10 años en la NBA a jugar siempre en Portland, logrando en 8 oportunidades avanzar a la postemporada, siendo siempre titular desde su debut hasta su último partido, lo que lo cataloga como el jugador franquicia; ya imaginarlo en otro equipo no resultaría normal y no sería nada sencillo que los de Oregon lo dejen ir tan fácilmente.

Pero también es de esos jugadores sin poder alzar aún el trofeo de campeón, por lo que sigue siendo algo que tiene en su mente y que siempre lo ha querido lograr siendo el referente en su actual equipo; el día que considere que difícilmente pueda ganar en Portland, es cuando lo podremos ver en otra ciudad, como por ejemplo Los Ángeles.