Se llevaba el dedo a la boca y decía “No, no, no” cada vez que taponaba a un rival que intentaba una canasta atacando su aro. Esa imagen se convirtió en una marca registrada de la historia de la NBA. Y su dueño, Dikembe Mutombo, ahora preocupa a todos los fanáticos del baloncesto ya que se encuentra comprometido en su salud.

Al ex pívot de equipos como Denver y Atlanta, en donde supo brillar en la década del noventa, le detectaron un tumor cerebral y debió comenzar un tratamiento agresivo para contrarrestar el cáncer que se le desarrolló en la cabeza, informó su entorno.

“Dikembe Mutombo se encuentra actualmente en tratamiento por un tumor cerebral. Está recibiendo los mejores cuidados posibles por parte de un equipo conjunto de especialistas en Atlanta y está con buen ánimo. Dikembe y su familia piden privacidad durante este tiempo para poder centrarse en sus cuidados”, ”, señaló la NBA en un comunicado emitido en nombre del ex jugador y su familia.

Por su parte, el comisionado de la NBA, Adam Silver, envió rápidamente un mensaje de ánimo a una las primeras grandes figuras del baloncesto del continente africano: “Nuestros pensamientos y oraciones están con Dikembe, uno de los grandes humanitarios del mundo”, expresó.

Mutombo, congoleño de nacimiento, jugó dieciocho temporadas en la NBA, en la cual debutó en 1991 tras ser escogido en el puesto 4 del Draft de ese año por los Nuggets. En Denver estuvo hasta 1996 cuando recaló en los Hawks, equipo en los que mostró su mejor nivel defensivo hasta 2001. Luego, pasó por Philadelphia, Nets, Knicks y tuvo un buen paso por Houston en los que jugó desde 2004 a 2009 cuando se retiró con casi 43 años.

Mutombo es conocido por sus labores humanitarias, sobre todo en su Congo natal. En septiembre de 2006, y gracias, en gran parte, a la labor de Mutombo, se inauguró en la República Democrática del Congo, justo en las afueras de la capital Kinshasa, el Hospital Biamba Marie Mutombo. Es la primera instalación moderna en Kinshasa en cuarenta años. El nuevo centro, que lleva el nombre de la madre fallecida de Mutombo, es un hospital y centro de investigación de 29 millones de dólares que incluye un área pediátrica especial, así como quirófanos y un centro para mujeres. Mutombo donó 15 millones de dólares para su construcción.