Todo lo bueno que ha hecho Phoenix Suns dentro del parqué del Footprint Center en los últimos años (con Finales incluida), ha quedado totalmente de lado con lo sucedido en los últimos meses fuera de la cancha. Primero, su propietario Robert Sarver ha sido sancionado por conductas misóginas y racistas en su labor como directivo del equipo. Y por si fuera poco, ahora se suma alguien más.

Según ha confirmado la prensa local, Jeffrey Marcussen, quien trabajó para los Suns de 2004 a 2019 como gerente de entradas, fue acusado en septiembre de 2020 de cuatro delitos graves, incluidos dos cargos por presentar declaraciones falsas de impuestos. Los fiscales alegaron que Marcussen vendió entradas para juegos de Phoenix en StubHub, un sitio de venta de entradas on line, sin autorización de los Suns, que no venden entradas en dicha plataforma.

Por eso mismo, fue sentenciado a un año en la cárcel del condado y tres años de libertad condicional por cargos de fraude y robo tras confirmarse que vendió un total de más de 2.800 entradas del equipo a través de esta página entre 2017 y 2019.

Marcussen se declaró culpable en abril y, como parte del acuerdo, acordó pagar 458.218 dólares a los Suns para restituir el fraude, según los registros judiciales. También acordó pagar 1.780 dólares al fondo contra el crimen organizado del Fiscal General de Arizona y 11.818 dólares al Departamento de Hacienda de Arizona. Fondos todos estos que ya han sido pagados en su totalidad.

“Me gustaría disculparme con los Phoenix Suns y todos mis excolegas dentro de la organización con la que trabajé durante más de 20 años. Aprecié mi tiempo con los Phoenix Suns y trabajé con mucha gente increíble. Por eso, era importante para mí hacer una restitución completa a la organización lo antes posible. También me gustaría disculparme con mi familia y amigos. Agradezco todo su amor y apoyo. No hubiera podido para superar esto sin ellos”, fue el comunicado de Marcussen que, de todas formas, no evitará la cárcel.