Los Playoff de la NBA tienen noches mágicas, eso es sabido. Pero cada tanto se ven también noches increíblemente sorprendentes con resultados inesperados. Sino díganselo a los Memphis Grizzlies que protagonizaron una de las remontadas de la temporada ante los Minnesota Timberwolves para sacar ventaja en la serie.

Perdían por 26 puntos en el segundo cuarto y por 25 en el tercero, pero los Grizzlies, en una fascinante lección de supervivencia, se llevaron este jueves la victoria 105-94 ante los Wolves para lograr el 2-1 en la serie tras un partido totalmente loco.

Con un devastador parcial de 12-37 en el último cuarto, los Grizzlies dejaron sin palabras a su rival que les habían pasado por encima durante casi toda la noche pero que se derritieron en el desenlace de forma totalmente llamativa, dada la intensidad que habían mostrado ante uno de los mejores equipos de la temporada.

Los números de los Wolves en ese cuarto parcial fueron para echarse a llorar: 3 de 19 en tiros, 1 de 11 en triples y 5 rebotes por 19 de sus rivales. De esta forma, los Grizzlies recuperaron el factor cancha y propinaron un duro golpe moral a unos Wolves que tendrán mucho trabajo en el vestuario para digerir una derrota muy dolorosa.
Desmond Bane (26 puntos, con 7 triples, y 6 rebotes), Brandon Clarke (20 puntos y 8 rebotes) y Ja Morant (triple-doble de 16 puntos, 10 rebotes y 10 asistencias) fueron fundamentales en la increíble remontada de los Grizzlies, que dejaron en el banquillo a Steven Adams por sus problemas para defender a Karl-Anthony Towns.
D’Angelo Russell (22 puntos y 8 asistencias) y Anthony Edwards (19 puntos y 7 asistencias) fueron los mejores de unos Wolves en los que Karl-Anthony Towns estuvo muy desacertado (8 puntos y 5 rebotes). Ciertamente, no está siendo la serie del dominicano, ya que también estuvo sin su aporte habitual en el primer juego ante Memphis, que también finalizó con derrota.