Fue la peor manera de despedirse y ese recuerdo de hace solo unos meses, las caras atónitas de la gente en las gradas del Barclays Center, mirando como Jayson Tatum y los Celtics hacían lucir bien pequeños, hasta mediocres a Kyrie Irving y a Kevin Durant, ese recuerdo está bien fresco.

Una barrida y terminando allí, en casa, aferrados a la idea de un “milagro divino” con el posible regreso de Ben Simmons hasta minutos antes del cuarto juego, pero Simmons no regresó.

Tras la derrota comenzó la crisis, que si Steve Nash, que si Sean Marks, que si salía Irving y también Durant, que si debían volver a traspasar a Ben Simmons y entonces en medio de todo este caos, de a poco, las piezas se fueron recomponiendo; Ben Simmons se recuperó e Irving y Durant decidieron seguir en el proyecto, pero…

Lo peor

Ni en la peor pesadilla, nadie podía imaginar que al momento de escribir este texto, los Nets, los “increíbles” Nets de Brooklyn estarían jugando para un deleznable récord de 1-6, con un Ben Simmons mediocre, desconectado por completo de la dinámica de juego del equipo y en modo general, una defensa paupérrima que no lucha rebotes ni ejerce la presión suficiente para limitar las acciones ofensivas de sus rivales.

De memorables se pueden calificar las derrotas de los Nets, muchas en casa, otra vez ante su gente, primero ante los Mavericks de Luka Doncic, después, este sábado ante los Pacers, 116-125 y entonces la idea del fracaso vuelve a merodear en el ambiente de Nueva York.

“… Ha sido un desastre…”- atinó a decir Steve Nash a los medios, tras ser increpado por el resultado ante Indiana y por el ritmo del equipo en general, tal como refiere ESPN.

De igual modo el estratega acentuó: “… No he visto el compromiso ni las ganas suficientes para poder frenar al rival y eso hay que cambiarlo ya…”

La crisis

En este punto, si un dato puede ilustrar la debacle de los Nets en lo que va de temporada es el rating defensivo de 121,6 puntos permitidos por cada 100 posesiones, solo situados detrás de los Pistons de Detroit, como los peores equipos de la liga.

Sin embargo, luego del partido ante los Pacers, la agencia Associated Press señaló que hubo una reunión entre los jugadores, de acuerdo con declaraciones del mismo Kevin Durant, ratificada por el mencionado Ben Simmons y sin dudas, tal vez sea la mejor señal dentro de este convulso panorama.

El cambio es ya y a todas luces la cuestión mental va jugando un rol protagónico en la proyección del grupo, de un grupo conformado para ganar pero que aun no termina de dar el gran salto, ¿llegará ese momento?,¿será otro año perdido?; en teoría queda tiempo, pero como ya hemos expresado, hay cosas que de no ajustarse en octubre o noviembre, después ya no tienen solución.