Miembro de una familia numerosa pero algo disfuncional; ella y sus hermanos desde pequeños siempre estuvieron cercanos al mundo del deporte, gracias a su padre, con quién muchas veces no pudieron compartir, aunque nunca les faltó una buena educación y el sustento del hogar.

Jeanie Buss, la tercera de cuatro hermanos del matrimonio del empresario Jerry Buss y su esposa Joann, es un caso netamente especial y que se puede considerar hasta inspirador por tratarse de alguien que siempre tuvo el éxito entre ceja y ceja y que nunca se amilanaba ante cualquier adversidad, algo que la llegó a diferenciar de sus propios hermanos, quienes también incursionaron en el mundo de los negocios.

Y es que muchas cosas han cambiado con el pasar de los años, sobre todo desde que la múltiple competencia se ha adueñado del mundo empresarial, en donde para ser exitoso se requiere de personas altamente capaces y con mucho nivel de conocimiento y versatilidad, más tratándose de un entorno empresarial que por muchos años estuvo siendo dominado por hombres y en donde la mujer tenía escasa o nula participación, algo que muchas veces resultaba en ignorar talentos que, al igual que cualquier hombre, podían brindar un gran aporte a cualquier causa u organización.

Apenas a los 19 años, Jeanie ya comenzaba a recibir parte del legado de su padre, cediéndole el cargo de directora general de las Strings de Los Ángeles, equipo de tenis profesional propiedad de Jerry, el cual dejara de existir 13 años después; esto no significó una pausa en su incipiente carrera dirigencial, ya inmediatamente asume las riendas del primer equipo de Hockey sobre patines de la ciudad, los Blades.

Jerry Buss, padre de Jeanie, de profesión ingeniero químico pero siempre con una firme vocación hacia los negocios y sobre todo por el baloncesto, trató de envolver a sus cuatro hijos para que tuvieran la preparación necesaria para cuando llegase el momento de tener que cederles el ‘trono’ de su imperio empresarial, siendo la franquicia de los Lakers su más preciado tesoro; al momento de esta declaración, Jeanie estaba siendo ubicada en la vicepresidencia de Operaciones comerciales del conjunto amarillo y púrpura.

Poco antes de eso, ya era parte de la junta directiva del ‘Great Western Forum’ de Inglewood, en ese entonces la sede oficial de los Lakers, que en esa década estuvieron algo séquitos de títulos en la NBA, hasta que se retiró Michael Jordan de la actividad y en paralelo Kobe Bryant y Shaquille O’Neal le comienzan a cambiar la cara a esta institución.

Pero más allá de los títulos, Jeanie siempre fue considerada por su padre como la más inteligente y capaz de sus hijos para asumir cargos importantes y con la sangre fría para la toma de decisiones, por encima de sus hermanos Jimmy y Johnny, quienes también ocuparon roles relevantes dentro de los activos de los Buss, pero con mucha intermitencia en cuanto a resultados.

De hecho, cuando ocurre el fallecimiento de Jerry Buss en 2013, Jeanie es quien toma el control principal de la franquicia californiana, junto con Jimmy, quién se ocupaba más de dirigir al personal, lo que incluía a los jugadores y cuerpo técnico. En cuanto a su otro hermano, Johnny solo tuvo a su cargo la dirección del equipo de la WNBA, las Sparks, desde los inicios de esta liga, pero sus problemas al frente de esta gestión, motivaron a la venta de este equipo en el 2007.

Su vida personal muchas veces no tuvo la estabilidad que siempre quiso, quizás por vivir sumergida desde muy temprano en este ambiente; estuvo 3 años casada con el ex jugador de voleibol de playa Steve Timmons, con quién deseaba formar su familia y éste le manifestaba que era algo que se tenía que dar a su debido tiempo, lo cual hizo que nunca prosperara.

Un poco después, al momento de iniciar su carrera ejecutiva con los Lakers, se hizo pareja de quien era el entrenador de la franquicia, el múltiple ganador Phil Jackson, en una relación de más de 17 años, la cual nunca se llegó a cristalizar por la vía del matrimonio, con todo y el compromiso que anunciaron por allá en 2012.

Paralelo a esto, la muy acelerada vida de Jeanie seguía retumbando con su breve paso por la revista ‘Play Boy’, esto en parte generado por las cercanías de su padre hacia esta corporación mundial del desnudo, cuando ella aún no llegaba a los 20 años de edad; de forma jocosa, Jerry dijo alguna vez que su hija fue la única modelo que no quiso mirar nunca, demostrando que el tener a una hija en ese ambiente no fue algo que le hiciera mucho ruido.

En medio de varias batallas legales con sus hermanos por el control y posesión de acciones de la organización de los Lakers, Jeanie siempre demostró con el tiempo que era la más indicada de su familia para estar al frente y que su padre tenía toda la razón ante esto. Se convirtió en la primera mujer propietaria de un equipo en ganar un título de liga (2020) y es algo que nunca le quitarán.

A propósito de su gestión dentro de tan importante organización, el reconocido canal Star+ presentó hace pocos días el ‘trailer’ del nuevo documental de 10 episodios denominado “Lakers, el Legado”, con el gran detalle que fue producido y dirigido por la propia Jeanie.

Por esto, y por tantas cosas que posiblemente no se hayan plasmado acá, Jeanie Buss es considerada como una de las personalidades más poderosas del deporte mundial, y sin duda, la mujer más importante dentro del entorno del baloncesto de la NBA, algo refrendado por el mismísimo Earvin ‘Magic’ Johnson, amigo de la infancia de Jeanie y también compañero de oficinas.