Ime Udoka es en baloncesto ahora mismo, como Aaron Coopland en la música, Salvador Dalí en la pintura o William Faulkner en la literatura; es un hecho, cuando en teoría no habría nada que inventar, esta reinventando el juego a niveles de un genio prodigioso.

Sabe leer los hilos de los partidos como pocos, quizás cortado a la vieja usanza, como Patt Riley, o de un modo más cercano, Red Auverbach; como sea, hay un punto en el que Udoka siempre encuentra la manera de generar las dinámicas favorables para mantener a los Celtics con vida en la cancha, con un cambio preciso, apretando en defensa, ya sea por zona o mixtas, de acuerdo con la situación dada en el tabloncillo, con el marcador y con el tiempo de juego.

Primero

Hoy todos miran al juego cinco y a la clase magistral de Al Horford, a los 23 minutos de Marcus Smart y a la personalidad de Derrick White, pero en diciembre no era así, los de Nueva Inglaterra comenzaron mal la temporada, jugando para 17-19 incluso antes de la primera mitad; pero todo cambió y el responsable de ello fue Udoka.

Hay disciplina y mucho talento, Tatum, Brown, Smart; todos extraclase, pero en buena medida, todos sabemos que el éxito de Boston está en el fuerte trabajo defensivo y Udoka piensa que por ello los Celtics se encuentran a un paso de regresar a una final.

Luego de la reciente victoria ante Miami, 93-80 el entrenador conversó con medios, como Usa Today y The Athletic, respecto al tema y aseguró que el agotamiento mental al cual someten a los rivales en defensa, esta llevando a los Celtics bien lejos en la postemporada.

La clave

El coach reflexionó en el que la presión defensiva fue lo limitó el poderío de los Nets y mantuvo en vilo a Giannis Antetokounmpo en la semifinal, pues los defensores de Boston hicieron bien complicadas las canastas a sus adversarios posibilitando un alto volumen de juego ofensivo en transición.

Respecto al juego de este miércoles, Udoka sentenció que fue importante mantener el choque cerrado rumbo al descanso, pues los anotadores tenían que aparecer y el sistema debía comenzar a funcionar, tal como ocurrió, siempre a base de una férrea defensa.

El dirigente no quiso pasar por alto la actuación de Marcus Smart, quien al final pudo jugar y aportar al equipo, pues si bien no está del todo recuperado, siempre suma en defensa y con su liderazgo.

El mensaje

A solo horas del sexto juego en el TD Garden, hay algo que pocos hablan y es que los Celtics no solo regresarían a una final doce años después de aquella derrota ante los Lakers 4-3, sino que cobrarían venganza del Heat, respecto a lo ocurrido en la burbuja de Orlando en 2020, cuando los de Florida sentenciaron en igual instancia a los verdes para pasar a discutir el título ante los Lakers.

Todo es obra de Udoka, sin dudas, ha logrado elevar el nivel de Jayson Tatum y del mismo Jaylen Brown a categorías de peso dentro del circuito NBA y sobre todo, tal vez lo más importante, rescató el último hálito de buen baloncesto que le quedaba a Al Horford y hoy, el dominicano está dando una lección de maestría que impresiona a todos.

Al mismo tiempo y tal vez para poner la ginda del pastel, Udoka podría ser en unas semanas, el hombre que ponga a los Celtics como la franquicia más ganadora de la historia con 18 títulos y con eso se habrá dicho todo por ahora.