Se le puede llamar dinastía. Y es que un equipo que haya disputado 5 de las últimas 7 finales de la NBA, lográndose titular en 4 de ellas pues se merece tal reconocimiento.

Este lunes, el coach Steve Kerr y los campeones Warriors celebraron con un desfile a través de San Francisco, con miles de fanáticos que salieron a las calles en un caluroso día de junio con una lluvia de confeti azul y oro. Esta vez, incluyeron rostros nuevos que también fueron parte del festejo.

Un conjunto que desde el inicio de la temporada en el mes de octubre de 2021 estuvo peleando los primeros lugares de la conferencia del oeste, finalizado tercero solo siendo superado por Phoenix y Memphis; sin embargo, en la postemporada demostraron para qué estaban hechos.

En una entrevista que los jugadores concedieron al canal NBC Sports, en la cual manifestaron su regocijo y satisfacción no sólo por el título obtenido, sino por la entera receptividad mostrada por sus aficionados en la ciudad de San Francisco.

Primeramente, el jugador referencia de este equipo, Stephen Curry, quién de forma curiosa, por primera vez obtiene el galardón de MVP en una final, considerando que este es su cuarto campeonato en su palmarés personal. “Tuve que sacar la joyería, ya que no la veo durante el año”, manifestó Curry al momento que lucía de igual forma sus otros 3 anillos de campeón.

“Esto es una locura”, ha declarado Klay Thompson quién regresó en enero después de más de dos años y medio de estar alejado de las canchas por una ruptura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda y de otra cirugía del tendón de Aquiles en la pierna derecha; sin duda, una de las figuras de esta final.

Otro elemento que pudo destacar es Jordan Poole, quién en más de una ocasión logró acaparar la atención con sus disparos de larga distancia (incluyendo uno desde la media cancha) al momento de finalizar un periodo. “Sabemos de lo que somos capaces, y estamos jugando al más alto nivel; puedes sentir esa energía y esa vibra positiva y todos nos apoyamos unos a otros”.

El camino recorrido.

Para llegar a esta gran final, los Warriors finalizaron la temporada regular con registro de 53-29, tercero en su conferencia, para luego en la postemporada dejar en el camino a los Denver Nuggets 4-1 y luego en la semifinal 4-2 a los Grizzlies, previo a su victoria ante los Mavericks en 5 duelos.