Los Lakers no tienen el control de su propio destino. Se sientan en el undécimo lugar en la Conferencia Oeste. San Antonio Spurs con mejor récord están en el décimo, y en caso de se hubiese dado un empate, San Antonio tiene el desempate. Todo apunta a un desenlace fatal para Los Ángeles Lakers de LeBron James.
Necesitan ganar dos partidos más que San Antonio antes de final de temporada, ya que tienen perdido el desempate con ellos. New Orleans ya a tres partidos de distanci son prácticamente inalcanzables.
LeBron esta temporada, ciertamente ha tenido una actuación digna de un líder, produciendo a un nivel élite.
Aún con el regreso de Anthony Davis, no hubo cambio en los resultados. Tras más de mes y medio sin jugar, el ala-pívot registrando un doble doble de inmediato, jugando a nivel de la estrella que es. La cuestión es que la temporada de los Lakers no responde a malas actuaciones individuales, sino a una falta de conjunción. Pese a la calidad individual, no han tenido resultados en conjunto.
«Va a ser difícil alcanzar a New Orleans ahora, dada la ventaja que tienen y el criterio de desempate, pero tenemos mucho tiempo para ganar tantos partidos como podamos en la recta final y ver qué pasa con San Antonio», comenta Frank Vogel, quien se sigue agarrando a las pocas opciones que les quedan.
Ha de ser la mayor caída para los Lakers en mucho tiempo. En la considerada por muchos como la franquicia más exitosa de la NBA, hay antecedentes de debacles parecidos, en donde una plantilla de estrellas no alcanzan las expectativas. Solo que nunca cayendo tan bajo como ahora.
Los Lakers de 2004 con Karl Malone, Gary Payton, Kobe Bryant y Shaquille O’neal perdiendo en las Finales con los Detroit Pistons. Cualquier resultado no fuese campeonato sería decepcionate. En 2013, los angelinos juntaban a Dwight Howard, Steve Nash, Kobe Bryant y Pau Gasol cayeron en primera ronda ante los Spurs por un contundente 4-0. Pero en esta ocasión, el equipo que más finales ha disputado y que más anillos ha conquistado junto a los Celtics, con LeBron James, Anthony Davis, Russell Westbrook y una plantilla valorada en 164 millones de dólares está a un paso de la mayor debacle de su historia quedándose fuera no ya de los playoffs, sino del ‘play-in’.
Según Skip Bayless, si los Lakers quedan fuera de la postemporada, dañará el legado de James de manera sustancial.
“Diré esto: lo que le ha pasado a sus Lakers de Los Ángeles esta temporada ha manchado de manera indeleble el legado de LeBron. Les recuerdo, estos Lakers eran favoritos para ganarlo todo. Y les recuerdo, ni siquiera van a hacer el Play In-e n el torneo. Voy a ‘estimar’ que van a terminar 18 juegos por debajo de .500. Más horrible imposible para ‘El Rey'”.
En la mente de Bayless, el propio James ha sido responsable de una gran parte de las trabas del equipo.
“Te daré una docena de juegos este año que ‘El Rey’ debería haber cerrado, y no pudo cerrar porque no tiene el gen del clutch”.
Bayless continuó argumentando que la forja del título de anotación de James ha distraído a los fanáticos de los problemas de los Lakers.
“El genio de LeBron es que nadie se conoce a sí mismo mejor que él. Sabía que a los 37 años en su temporada ya no es capaz de cargar con un equipo, así que en el receso del Juego de las Estrellas se dijo: ‘Tengo que hacer lo que quiero. Convertirme en mago y distraer a la audiencia de lo evidente: nos perderemos los playoffs. ¡Voy a ganar el título de anotación en mi campaña 19!”
Está liderando la liga en tiros intentados y anotaciones. Brillante. Pero el perderse los playoffs es para muchos un detalle muchisimo más importante que conseguir el título de anotación, y es el gran pero que le quieren hacer cargar.
James está promediando 30,1 puntos, 8,2 rebotes y 6,3 asistencias por partido, sus números no siempre se han traducido en victorias, y los Lakers van camino a un debacle histórico.
En un breve tuit,el primero de abril pasado, “The King”, indicó: “estoy fuera por la temporada oficialmente . Nos vemos en el otoño”.
Rápido su mensaje se viralizó en Twitter siendo tendencia por varias horas. El detalle, es que este 1 de abril en los Estados Unidos se celebra el April Fools Day (Día de los Inocentes), así que se trató de una broma del futuro miembro del Salón de la Fama que a muy pocos hizo gracia.
Algunos se indignaron, han cuestionado incluso su estatus de GOAT, y desaprobado su broma respecto al peligro de descalificarse en que se encuentra la franquicia.
LeBron James se va a convertir en el máximo anotador de la historia de la NBA. Esto reforzará a los argumentos de quienes lo consideran el más grandioso jugador de la NBA de todos los tiempos. No obstante, otros apuntan que no bastan los números y los títulos para tal consideración y el peso en el legado.
Precisamente el jugador al que LeBron está a punto de destronar, Kareem Abdul-Jabbar, ha sido históricamente ninguneado. Los Lakers de los ochenta fueron de Magic Johnson, no de Kareem. Así, Kareem lleva siendo máximo anotador de la historia casi cuatro décadas. Fue cinco veces campeón (incluyendo una vez, la primera, con Milwaukee Bucks). Es el mejor jugador de la historia de la NCAA. Fue un ídolo de masas. Y casi nadie lo traen a la discusión.
LeBron ha sido un ganador prácticamente durante toda su carrera, incluso en sus derrotas en las que llegó de underdog, se le reconoce el trayecto al superar las expectativas de esos conjuntos entonces. Pero, ciertamente, quedarse fuera de los Play In sería una gran mancha roja en su legado, como la gran tormenta de Júpiter. Y es que, todo se magnífica cuando todo se espera de ti. Y esa es la cruz de los más grandes. Con una nómina tan alta, y constelación de estrellas, no se permite exigirle menos al rey. Estos resultados son inaceptables para los Lakers, y su líder, cargará con el dedo acusador.